La política hay que entenderla dentro en su contexto social

La política hay que entenderla dentro en su contexto social

Creo que es preciso definir qué concepción puedo dar de lo que es política. Según lo que he aprendido la política puede entenderse como una actividad que ejercen las personas dentro de un tipo de relación donde se juegan roles, reglas, multiplicidad de poderes y estos elementos están relacionados con la capacidad de gobernar o persuadir sobre las otredades y perpetuar un tipo de poder. Así mismo entiendo, aunque desde una definición diferente, que la (ciencia) política se centra en el estudio de las entidades gubernamentales y su funcionamiento.

No puede existir política si no existen las personas. Lo individual conformaría la unidad básica de cualquier grupo. Si partimos de lo más micro, el onto conforma con toda su particularidad identidades y deseos los cuales se forjan y alcanzan o se tratan de alcanzar mediante relaciones o alianzas estratégicas y esto es un ejemplo de política en sí misma. La persona se ve inmersa en un mar de otras individualidades, de otredades que lo conforman a él y a la sociedad. Aunque el ser humano visto como una integración biológica, psicológica, social y espiritual tiene la capacidad de forjar su propio camino y su idiosincrasia da paso a sucesos únicos e irrepetibles que solo serán entendidos por su comportamiento, motivos, pensamientos y moral durante el tiempo y el lugar donde se desarrollan.

Teniendo en cuenta lo último mencionado, para mí la política, como ciencia y como actividad debe ser encuadrada y lineada dentro de parámetros contextuales como el tiempo y el lugar donde se debe comprender que tanto los individuos como los grupos son irrepetibles, aunque existan leyes o máximas generales que les rijan y que estás funcionan en constante metamorfosis perceptible e imperceptible. La varianza de estructuras, instituciones y sus funcionamientos, actores políticos sociales, ideologías y fenómenos como la desigualdad, la pobreza, la estratificación demarcan también su presión dentro de la sociedad y la transforman en un estadio político nuevo que cambia o permanece según también lo hace su gente.